Año de noches en vela y desechos

Llevo un tiempo intentando llenar huecos que me abruman, me molestan y me quitan el sueño a la vez. Vacíos existenciales, personales, íntimos, también profesionales o vocacionales, como cojones queráis llamarlos. Son éstos últimos los que más me atormentan, llevándome a pasar largas noches a solas conmigo mismo, tratando de ponerme en orden para encontrarme, siendo lo más sincero conmigo mismo.

Ha sido un curso de lamentos y pesares, duro como nunca los he visto, desilusionante en su totalidad. Ya de por sí es complicado tratar de sacar una obra buena, como para hacerlo en un estado de desasosiego. Me he sentido amedrentado por figuras que se supone deben amar el Arte, y en cambio, me he encontrado con personas egolatras, gente que metió la cabeza en su culo a tal profundidad que sería imposible sacarla de nuevo. Gente enferma, no se si decir como yo (a estas alturas es probable), no quiero ser duro con esta clase de gente, Dios sabe qué es lo que las ha llevado a ese estado de estupidez integral.

No trato de excusar mi falta de empuje con el comportamiento de estas personas, pero es lamentable que esta gente rija las idas y venidas artísticas. El Arte, otra gran mentira, el arte no ha de ser un puto producto señores, no es algo que alguien compra y cuelga en una pared de su casa o lo pone en el recibidor de ésta. ¿Y qué coño es el Arte entonces? más de uno dirá, creyendo ser gracioso, que es "morirse de frío", tal vez no anden mal desencaminados. Quizá haya que morirse de frío, de hambre, de sed, de cansancio, de tristeza, de locura o de amor. Tal vez de todo lo anterior junto, no me creo el trabajo de la gente que no ha sufrido amargamente o haya sucumbido embotado del mayor de los éxtasis. Podéis llamarme deficiente mental, amargado, ñoño, hipócrita o lo que os salga de las gónadas, no va a haber ningún tipo de problema.

Y todo este vómito verbal que he soltado anteriormente, me lleva a preguntarme si tal vez el absurdo es el que rige todo. Espero estar equivocado en mi totalidad por el bien de mi integridad, de estar en lo cierto más  le vale a más de uno inventarse una excusa absurda para justificar sus obras. Yo señores, seguiré con mis rebanaduras de sesos, mis noches en vela y mis historias, únicamente para aportar algo sincero, algo puro y eterno que me haga sentir que he esparcido pedazos de mí mismo en la obra. 

Por ello ruego que me disculpéis por no haber subido nada , o más bien casi nada, durante este curso. Tampoco sé si esperabais algo, en ese caso, esto es lo más sincero y parcialmente íntegro que he podido sacar este año. Pido perdón de antemano por mi atropellada prosa y me despido de ustedes hasta nuevas historias, que espero tendrán un cariz más afable y sosegado, mientras disfruten del Buen Arte y tengan una feliz existencia. Gracias por la atención.